martes, marzo 30, 2010

A veces

A veces querría estar zumbado. Estarlo, incluso aunque acabara contrayendo el mismo poso de melancolía en la mirada de quien te dice que no entiende por qué le rechazan. Por ejemplo, me gustaría enviarle un e-mail a alguna de esas modernas con flequillo que publican en internet fotos suyas con mucho contraste para decirle, si fuera el caso, "me gustan tus manos" (o cualquier otra apreciación lacónica y sin sentido). O entregar, todo mutismo, una nota que diga "tus ojos son droga dura" a una bibliotecaria. Me gustaría, cada día, decir a quien lo mereciera "es usted la mujer más bella que he visto hoy". O, incluso, (¿por qué no?) "su elegancia le distingue, caballero".
Pero no sólo esto. No quiero limitarme a los arrebatos de admiración por el sexo opuesto, desquiciados actos de presunta poesía y certero patetismo que a la larga pueden ser disculpados por una posible sobredosis de comedia romántica. No es que quiera ir por ahí ensalzando las virtudes ajenas o abrazando la belleza de la vida. También querría seguir hasta su casa al desagradable tipo que profiere opiniones pendencieras y poco fundamentadas en un bar y escribir furtivamente en su puerta, con rotulador indeleble, "no estoy de acuerdo". O susurrarle a un niño repipi y pedante: "nadie te toma en serio". O dejarle a un camarero borde, como única propina, una tarjeta que diga "no haces bien tu trabajo". O escribir con espray "este sitio era mejor antes" en el suelo de alguna de esas plazas que han sido transformadas en eriales de hormigón por algún alcalde con ínfulas y dinero que malgastar.
Pero no creo que jamás haga algo así. Me asusta, en realidad, una idea: si algún día me atrevo a estar zumbado, ¿qué desearé entonces?

4 Comments:

Anonymous CM said...

me gusta este rollo améliesco ternurito lanzaroteño fundamentado.

sehr gut:

1:12 a. m.  
Anonymous UNO QUE SE VA DE PUTAS CON CIERTA REGULARIDAD said...

Digo yo que la condición para estar zumbado no es atreverse, hay que estar zumbado para estar zumbado, o que, bueno y yo que se....

11:25 p. m.  
Blogger Cronista Disperso said...

Como diría Cantinflas: Ahí está el detalle, señor Lee. Si uno no se atreve a estar zumbado es que no lo está. Y menos mal.

Por cierto, si una persona no es una lista de datos, tampoco debería ser una ostentación de sus vicios, ¿no? :D

Lo de "améliesco ternurito" me ha dolido, monsieur CM. Pero no mucho.

10:16 p. m.  
Anonymous Jorge Lee in Memorian said...

Yo no he escrito el segundo comentario. En todo caso habrá sido uno que va con cierta regularidad, yo voy con regularidad.

10:41 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home